He vuelto a ver a mi ángel,
esta vez me ha dado largas,
he vuelto a visualizarle,
sin querer verme, dio la espalda.
Casi cerca y tan distantes,
hubo terceras, primeras personas.
Labios callados por un instante,
flotando en la belleza que te sobra.
Con más ganas de hablarte me quedo,
con el alma seca a base de dolor,
algo más de un tiempo sin verte llevo,
y aún así, te recuerdo como la mejor.
Añoro el fuego loco de tus ojos,
tu sonrisa acostada en mi mirar,
mis sueños pintados a mano, de rojo,
por pasión por ti, soledad o malestar.
Con un silencio en susurro me hago,
sin ti, con tu voz inmediata y sorbida,
con más placer del que me da un trago,
por verte, cerca y lejana, y para mí; perdida.
Me acerco al recuerdo que, aún hoy, me crece.
Por unos días, sé que me quisiste (quizá lejos),
persiste el problema, que en llanto me retuerce,
sigo en tu ausencia, y aún llorando, no me quejo.
"...Y nunca más supe de ella, hasta que mi garganta susurró su nombre a mis oídos para convencerme de que, lo que veían mis ojos, era su cercana presencia a infinita distancia de mi."
2 comentarios:
estupendo universo para perderse
Me alegro que sea de tu agrado este universo, ebeb.
gracias por tu lectura, y mas aún por tu complaciente comentario.
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